Cada hombre se lee como un libro…cada hombre se compone de estados que esconde en algún rincón del alma…algunos atraviesan el piso helado como una púa de vinilo…otros solo aprendieron a reírse…algunos mueren cuando nadie los ve…otros, solo escupen sobre un papel algo, que les gustaría decir…y entonces hay tiempo para eso…aunque sea mínimo…un discurso mirando la pared…un sentir…sin esperar algo a cambio…la jauría, entonces, se mueve en círculo…la luna parece otro disco que gira…alguien pasa y sonríe…mañana, anunciaron neblina….y será mejor dormir temprano…Un perro agudiza el olfato al pasar por una parrilla al paso…las prostitutas en la esquina se llevan a un joven a algún lugar...va contento y ellas también…en alguna parte del mundo… el licor y las jeringas se venden como agua, dijo el poeta… y en ese instante ,el hombre que comió se para y pide la cuenta…mientras se acuerda que en su casa la bomba del lavarropa no funciona…y que tendrá que lava...
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